EL SALMON CHICO ES EL ORIGINAL...EL GRANDE FUE MODIFICADO GENETICAMENTE AGREGANDOLE GENES DE OTRA ESPECIE.
Los proyectos para
etiquetar alimentos transgénicos en Estados Unidos
son un goteo incesante, hace un par de años nos hacíamos eco del
proyecto de ley aprobado por la asamblea del Comité de Salud de
California, se trataba de una reglamentación para
etiquetar el pescado transgénico.
El proyecto se había puesto en marcha ante la posibilidad de que la FDA
aprobara el salmón transgénico, el objetivo era que los consumidores
pudieran identificar el tipo de salmón que se comercializaría en las
pescaderías y que eligieran según sus convicciones.
Esta fue una iniciativa que salió adelante y que parecía sentar
precedentes para que se etiquetarán otros alimentos modificados
genéticamente, pero como sabemos de momento no ha sido así, recordemos
por ejemplo hechos más recientes como la
Proposición 37,
proyecto impulsado por la iniciativa Derecho a Saber de los Alimentos,
en el que se solicitaba una nueva reglamentación sobre el etiquetado de
los alimentos transgénicos en este estado el proyecto fracasó.
Recientemente se ha puesto en marcha una campaña similar en Washington
solicitando este tipo de etiquetado a través de la
Iniciativa 522,
lo mismo se pretende plantear en Oregón y además otros estados se están
sumando a este tipo de solicitudes, recordemos por ejemplo el Proyecto
de Ley SB 18 en el que
Nuevo México pide el etiquetado de piensos y alimentos transgénicos.
Pues bien, ahora conocemos una propuesta similar a otras que han logrado
su cometido, como la que hemos referenciado al principio o la
legislación que se aprobó en el año 2005 en Alaska, se ha propuesto un
proyecto de ley denominado
Medida SB 155 para que en
Missouri se pueda
etiquetar la carne y el pescado de animales modificados genéticamente,
la iniciativa está impulsada por el senador Jemilah Nasheed (estado de
San Louis) y su objetivo según sus declaraciones, es facilitar que los
ciudadanos puedan acceder al derecho a saber, que sepan qué tipo de
alimentos adquieren en los comercios. El proyecto se plantea
coincidiendo con la posibilidad de que en breve la FDA
apruebe el salmón transgénico
y la preocupación que ello suscita. La denominada Propuesta SB 155
solicita que cualquier tipo de carne o pescado que provenga de animales
modificados genéticamente y su descendencia, sea claramente identificado
a través de las correspondientes etiquetas alimentarias a partir del 1
de septiembre del año 2015.
De salir adelante el Proyecto de Ley, permitiría que el Departamento
de Agricultura de Missouri, exigiera el etiquetado de alimentos
modificados genéticamente (carnes y pescados), se deberían etiquetar
todos aquellos productos que han sufrido el uso de técnicas de ADN
recombinante o ADN recombinado, es decir, la unión de secuencias de ADN
procedentes de dos organismos de especies diferentes. La introducción de
material genético exógeno, la alteración de la posición de un
determinado gen, la deleción de un gen (pérdida de un fragmento de ADN) o
duplicación… es decir, todo lo que esté relacionado con la modificación
o manipulación genética.
Como decíamos, en Estados Unidos se presentan cada vez más proyectos
para etiquetar alimentos modificados genéticamente, algo que
evidentemente no gustará a la industria alimentaria, cada vez se abren
más frentes y como decían los partidarios de la Proposición 37, se puede
perder una batalla pero la “guerra” continúa y el final es incierto. El
caso es que si esta ley sale adelante y se cometieran infracciones en
el etiquetado, se considerarían un delito menor de Clase C, es decir, un
delito que se sancionaría con una multa, se puede decir que es un
principio para intentar cambiar las actuales leyes.
Son muchas las personas que creen que se deberían
etiquetar
este tipo de alimentos permitiendo a los consumidores que decidan si
quieren o no consumirlos, si realmente no existen problemas con los
transgénicos
tal y como se indica desde la FDA bajo el principio de equivalencia
sustancial, ¿por qué negarse a ello?. Al respecto nos gustaría recordar
de nuevo las declaraciones de Mairead McGuinness, miembro del Parlamento
Europeo que trabaja en el comité agrícola, el parlamentario declaraba
que la falta de información pública ha provocado que se socave la fe en
la ciencia, ha existido demasiado mutismo y poca transparencia en toda
la trayectoria de los
alimentos modificados genéticamente, esta es una de las principales causas por las que existe una gran oposición a los alimentos biotecnológicos. A través de
este enlace (Pdf) podréis conocer más detalles de la
Medida SB 155.
FUENTE: http://www.gastronomiaycia.com/2013/01/24/en-estados-unidos-aumentan-los-proyectos-para-etiquetar-alimentos-transgenicos/
ES MI OPINION.
QUE ESTE DEBATE DEBE DARSE EN SUDAMERICA. YA SE DA EN EUROPA Y EEUU. ¿SERA QUE EN ESOS LUGARES SI SE PREOCUPAN DE LA SALUD DE SUS CIUDADANOS? ¿Y ACA, SERA QUE SOMOS CONEJOS DE INDIAS PARA LA PRUEBA , PARA SABER SI NOS HACE BIEN O MAL?
EDMUNDO F GABUS TOGNOLA